La calidad del aire en el centro de Medellín registró un deterioro significativo durante los últimos días, especialmente en corredores de alta movilidad donde confluyen buses, motos, taxis y peatones. Los sensores instalados en la zona mostraron incrementos en material particulado, lo que vuelve a poner en discusión las condiciones ambientales del corazón de la ciudad.
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Contaminación en el centro: un problema que persiste
Las mediciones recientes evidenciaron picos elevados de PM2.5 y PM10 en puntos como la Avenida Oriental, Junín, San Juan y la zona de la Alpujarra.
Expertos consultados por el Área Metropolitana explican que la combinación de alto flujo vehicular, bajas corrientes de viento y el uso intensivo del espacio público generan acumulación de contaminantes, afectando principalmente a quienes transitan y trabajan en el centro.
Comerciantes y transeúntes reportaron molestias respiratorias y olores fuertes, mientras que usuarios frecuentes de ciclorutas aseguraron que la polución se siente con mayor intensidad durante la mañana y el final de la tarde.
Ciclorrutas afectadas por el aumento de vehículos
Las ciclorutas del centro —especialmente las de la Avenida Oriental y la Calle Maturín— han recibido más usuarios en los últimos meses, pero también se han visto impactadas por el aumento de motocicletas y vehículos que invaden los carriles exclusivos. Esta situación no solo incrementa la contaminación, sino que también pone en riesgo a ciclistas y peatones.
Organizaciones de movilidad sostenible solicitaron controles permanentes para evitar el uso indebido de estos espacios y garantizar condiciones más seguras para quienes han optado por la bicicleta como medio de transporte.
Medidas en evaluación para mejorar la calidad del aire
La administración municipal y el Área Metropolitana analizan ajustes a los planes de movilidad, horarios de carga y estrategias de control vehicular para reducir la emisión de contaminantes en la zona céntrica.
Entre las medidas que se estudian están el aumento de presencia de agentes de tránsito, campañas de educación ciudadana y posibles restricciones temporales cuando los niveles de contaminación superen los rangos permitidos.
Mientras tanto, los expertos recomiendan evitar la actividad física intensa en las horas de mayor congestión y usar tapabocas certificados para mitigar la exposición a partículas contaminantes.
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